OBRA

P | A | N

P | A | N – Proyecto de Amasandería Nacional es una panadería ambulante que se movió por las calles del Barrio Yungay invitando a la comunidad a participar de una acción colectiva: amasar y producir pan. El gesto de cocinar en un espacio público, creando una performance comunitaria, permite establecer lazos de colaboración entre las personas del barrio y de cercanía ínter-generacional.  El pan representa la comida cotidiana y del pueblo, mientras que la acción del amasar conjuntamente propone simbólicamente una unión de clase.

Diez estaciones, estratégicamente seleccionadas y correspondientes a lugares de interés público, para cubrir la totalidad y diversidad del barrio, determinaron los nodos de acción y los radios de influencia donde los vecinos han sido invitado a participar de esta acción colectiva. Cada estación ha sido temporalmente ocupada por un tradicional triciclo panadero modificado para acoger la producción colectiva de pan por parte de los vecinos del sector: una superficie para amasar, espacio de acopio de materia prima y un horno de barro para hornear. Esta acción permitió interactuar directamente en la relación entre el espacio público y la esfera privada y personal, fracturando las jerarquías y los roles.

Créditos
El proyecto se desarrolló en colaboración con los alumnos del Taller Latitud Sur 2016, de la Facultad de Arquitectura, Arte y Diseño de la Universidad Diego Portales:
Valentina Orlandi, Nicole Díaz, Alejandra Ugalde, Valentina Magallanes, Franco Mazzarelli, Teresita Contreras, Ramiro Figueroa, Camila Letelier, Catalina Marchant, Isidora Cornejo, Magdalena Sapunar, María José Larrachea, Carolina Espinoza, Franco Monzoncillo, Luciana Toscanini y Javiera Castillo.

En Santiago la obra se ha presentado en la Fábrica Caffarena, antigua empresa textil del barrio Yungay, lugar de implementación de las primera técnicas de modernización industrial y de los siguientes debates sobre los derechos sociales. Al interior de una de las salas se ha instalado un túnel en cuyas paredes se exhiben los vídeos de las performances, para crear una experiencia inmersiva de la obra y cercana al acto performativo. Las pantallas están gráficamente unida entre ellas por patrones que imitan un diagrama de las conexiones entre los tres computadores de Raqs Media Collective y el mundo, reforzando así la idea de colectividad.

ARTISTA

Catalina Pollak

Catalina Pollak Williamson (Santiago, Chile, 1975) vive y trabaja en Londres. Es artista y arquitecto. Está interesada en las políticas del espacio público y, particularmente, en los mecanismos culturales que rigen la relación entre lo público y lo privado en la producción del espacio urbano. Su trabajo explora conceptos de exclusión y control, privilegio y poder, cuestionando temas de accesibilidad y democracia urbana a través de procesos que invitan a la participación y resaltan el valor de lo público. Tomando la forma de estrategias interdisciplinarias insertas en el ámbito público, estas narraciones forman el núcleo del trabajo de Public Interventions, plataforma para la colaboración y la investigación que ella dirige desde 2012.

www.publicinterventions.org

LUGAR

Barrio Yungay

El Barrio Yungay, fundado el 5 de abril de 1839, es el “primer barrio planificado de la ciudad de Santiago”, concentrando parte importante del patrimonio arquitectónico del siglo XIX y XX.

El barrio, diseñado por Jacinto Cueto y Juan de la Cruz Sotomayor, se estructura en forma de damero, siguiendo la línea del centro histórico de la ciudad colonial, pero como una urbanización separada del resto de la ciudad.

A mediados del siglo XIX, las construcciones eran casas quintas de un piso, con patios interiores y construidas de adobe, material que se secaba en la misma Plaza Yungay. En este sector existen seis Monumentos Históricos, además de 4 zonas típicas y zonas de conservación histórica, que suman más de 180 hectáreas. El Barrio Yungay es considerado como un punto germinal de la cultura urbana y republicana chilena por albergar a importantes personajes. Al día de hoy, el barrio sigue teniendo una connotación cultural por sus habitantes y por la presencia de los inmigrantes latinoamericanos que han revitalizado el sector.